Yoga Sūtras
Aforismos
sobre Yoga de Patañjali
Samādhi Pāda
| Sadhana Pāda
| Vibhūti Pāda
| Kaivalya Pāda
Actualizado: marzo, 2018
तदा सर्वावरणमलापेतस्य
ज्ञानस्यानन्त्याज्ज्ञेयमल्पम्॥३१॥
tadā sarvāvaraṇamalāpetasya
jñānasyānantyājjñeyamalpam
Entonces, a causa de la inmensidad del conocimiento
[alcanzado] que ha eliminado todo obstáculo e impureza, poco queda por conocer
[que merezca la pena]
(Traducción
propia)
(Otras
traducciones)
Vyaas
Houston |
Entonces, a causa de la infinitud del conocimiento, que ha eliminado el sedimento de todas las coberturas, poco queda por conocer |
Georg
Feuerstein |
Entonces, [si] se eliminan todas las coberturas de imperfección, poco [queda] por conocer a causa de la infinitud de la sabiduría [resultante] |
Christopher
Chapple y Yogi Ananda Viraj |
Entonces, poco queda por conocer debido a la inmensidad del conocimiento que está libre de toda impureza |
P.
V. Karambelkar |
Entonces, a causa del ilimitado conocimiento de éste (yogui), que se ha liberado de todas las envolturas (es decir, factores oscurecedores) (e) impurezas, se da (es decir, queda) poco (es decir, nada más) merecedor de conocimiento |
James
Haughton Woods |
Entonces, a causa de la infinitud del conocimiento que ha destruido todos los impedimentos limitadores, es poco lo que queda por conocer |
Emilio
García Buendía |
Entonces, a causa de la infinitud del conocimiento libre de toda cobertura de impureza, lo que tiene que ser conocido (es) poco |
Oscar
Pujol |
Entonces, el objeto cognoscible se vuelve pequeño debido a la infinitud de un conocimiento depurado de todas las impurezas y desprovisto de todos los velos |
Vocabulario
tadā sarva-āvaraṇa-mala-apetasya
jñānasya ānantyāt jñeyam alpam
tadā (entonces), jñānasya-ānantyāt (a causa de la inmensidad del conocimiento), sarva-āvaraṇa-mala-apetasya (que ha eliminado todo obstáculo e impureza), jñeyam alpam (poco queda por conocer)
tadā: (indecl)
entonces, en ese caso, en ese momento, de esta forma, de acuerdo a algo,
además; 1) hace referencia a algo anteriormente citado.
sarva-: todo, cada uno, entero,
completo.
āvaraṇa-: cobertor, velo, barrera,
impedimento, obstáculo.
mala-: impureza, imperfección,
corrupción.
apeta
(apetasya): (n, gen, sg) de lo que se ha eliminado, destruido o liberado.
jñāna (jñānasya): (n, gen, sg)
1) del conocimiento, de la comprensión o experiencia; 2) de la intuición; 3) de
la gnosis; 4) del estado en que se conoce algo.
ānantya
(ānantyāt): (n, abl, sg) a causa de la inmensidad,
debido a la infinitud.
jña (jñeyaṃ): (n, nom, sg) conocimiento, sabiduría, inteligencia.
—Desde el punto de vista gramatical es interesante resaltar
el gerundivo que aparece en este sūtra con la palabra jñeyam y ello porque al gerundivo se
le designa también como participio de necesidad por lo que se quiere transmitir
por parte del autor una idea de necesidad. Es “necesario y posible” obtener
dicho conocimiento del que se habla aquí (Emilio García Buendía, Emilio “El yoga como sistema filosófico”, pag. 470).
alpa
(alpam): (n, nom, sg) poco,
insignificante.
Otras variaciones del texto original:
tadā sarvāvaraṇamalāpetasya jñānasyanaṃnyājjñeyamalpam
tadā sarvāvaraṇamalāpetasya
jñānasya’a’nantyājjñeyamalpam
Vyāsa —
Yoga-Bhāṣya (s. V.)
sarvaiḥ
kleśa-karmāvaraṇair vimuktasya jñānasyānantyaṃ
bhavati |
El conocimiento que resulta
totalmente liberado de las causas de aflicción y del karma, se vuelve inmenso.
—En este sūtra se sostiene de nuevo que el conocimiento carece de límite
alguno como ya se afirmó previamente en el sūtra 54 del libro tercero basándose
dicha afirmación en el hecho de que quien conoce no es la mente humana sino la “consciencia
pura” (puruṣa) la cual alcanza desde lo más ínfimo hasta lo más grande;
se repite la idea de la omnisciencia. Este aforismo en congruente con lo que se
viene afirmando en los anteriores pues si dicho conocimiento discriminativo
elimina las causas que producen aflicción siendo éstas las causantes de la
ignorancia (avidyā), una vez eliminadas, se
alcanza dicho conocimiento omnisciente (Emilio García Buendía, Emilio “El yoga como sistema filosófico”, pag. 470).
āvarakeṇa
tamasābhibhūtam āvṛta-jñāna-sattvaṃ kvacid eva
rajasā pravartitam udghāṭitaṃ grahaṇa-samarthyaṃ
bhavati |
Cuando domina tamas, el conocimiento infinito que es sattva, queda oscurecido, pero puede percibirse parcialmente cuando se activa
rajas.
tatra
yadā sarvair āvaraṇa-malair apagatam amalaṃ bhavati, tadā
bhavaty asyānantyam |
Entonces, cuando se libera de
todas las impurezas que lo cubren, deviene infinito.
—Hay tres cuestiones que son de interés para todo el mundo:
(i) ¿qué es lo que hay dentro de mí?; (ii) ¿qué es lo que hay fuera de mí?;
(iii) ¿qué hay más allá? Pero ahora nada queda por conocer. La mente ya no se
nubla con los impulsos normales (von Romberg, Margo “https://sanskritdocuments.org/sites/athayoga/sutra_ch4phn.html“).
jñānasyānantyāj
jñeyam alpaṃ sampadyate, yathākāśe khadyotaḥ |
Con la infinitud del
conocimiento, lo que queda por conocer resulta insignificante, como una
luciérnaga en el (inmenso) cielo.
—La finita conciencia empírica puede conocer un solo
aspecto de la realidad a cada momento, mientras que los demás aspectos
permanecen ocultos. Esto se debe a la impureza natural o imperfección de la
conciencia (atención selectiva). Sin embargo, cuando se vacía de la actividad
conceptualizadora, la conciencia refleja las cosas como son en sí mismas.
Paradójicamente, cuanto más se disminuye la actividad de la conciencia más
comprensible se vuelve el conocimiento o la esfera de la conciencia. Gracias a
la visión de discernimiento, la conciencia se vuelve transparente y se aproxima
a la omnisciencia de la conciencia del si-mismo-esencial (III.54)
(Feuerstein,
Georg “The Yoga-Sūtra of
Patañjali”).
yatredam
uktam—
Al respecto, se ha dicho (que si
el liberado en vida tuviese que renacer sería tan absurdo como):
andho
maṇim avidhyat tam anaṅgukir āvayat | agrīvas taṃ
pratyamuñcat tam ajihvo’bhyapūjayat || iti ||31||
“el ciego taladra la piedra
preciosa;
el manco la ensarta con un hilo;
la luce quien no posee cuello;
la alaba el mudo”
(Tāitt.
Āraṇyaka.I.11).
Bhoja — Rāja-Mārtanda
(1018-1060)
||4.31|| āvriyatē cittamēbhirityāvaraṇāni
klēśāsta ēva malāstēbhyō.pētasya
tadvirahitasya jñānasya
śaradgagananibhasyā||nantyādanavacchēdāt
jñēyamalpaṅ gaṇanāspadaṅ na
bhavatyaklēśēnaiva sarvaṅ jñēyaṅ
jānātītyarthaḥ.
Las
imperfecciones naturales, por las cuales está recubierta la mente, son los
impedimentos y también los defectos. Estar despojado de ellos significa estar
exento de ellos. Debido a la infinitud o ausencia de delimitación del
conocimiento, semejante a un cielo sin nubes, lo que se puede conocer resulta
un asunto de poca monta, es decir, que se puede conocer todo sin dificultad.
Este es el sentido.
Śaṅkara
Bhagavatpāda — Yoga-Bhāṣya-Vivaraṇa (s. XIV)
El conocimiento puro sattva, suprimida la impureza de rajas, es como un gran océano sin olas, aislado, inmutable —¿cómo podría
percibir algo en ese estado? Igual que en la inmensidad del océano puede soplar
el viento, la mente en su estado más puro (sattva) es activada mediante rajas. No hay
actividad en la mente como tal, pues la capacidad para la acción deriva de rajas. Aunque para el ciego resulta imposible taladrar la piedra preciosa, a
través de la ilusión se comprende que la perfore. De igual forma, la relación
entre conocimiento y conocido solo se mantiene en el estado de ilusión (viparyaya). Sin ilusión, los guṇas
se vacían de todo objetivo para puruṣa.
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